Agresiones a fotorreporteros

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Golpean manifestantes a fotógrafo durante una marcha

México, 13 de marzo de 2008.- Jesús Agustín Martínez García, fotógrafo del periódico El Universal Gráfico fue golpeado por manifestantes del Movimiento El Barzón Popular, durante una protesta en el municipio de Ecatepec, Estado de México (centro), el 10 de marzo de este año.

En entrevista con el CEPET, Martínez García afirmó que la agresión se dio sin motivo y que se le lanzaron encima cuando lo vieron que estaba cumpliendo con su labor informativa.

Los manifestantes golpearon y patearon al reportero gráfico. “Me rompieron la cámara y me robaron el flash”, aseveró.

“Al ver que estaba tomando fotos se me aventaron encima incitados por el líder de El Barzón, Enrique Cifuentes Chairez y también por Guadalupe Bravo, que es otro de los líderes; él fue quien me robó el flash”, agregó Martínez García.

El reportero gráfico dijo que de inmediato denunció los hechos ante las autoridades ministeriales por las agresiones, el daño material y el robo de su equipo, aunque ha recibido llamadas por parte de los dirigentes del Movimiento El Barzón Popular para comprometerse a recuperarle su material de trabajo.

Asimismo, refirió que ha recibido total apoyo por parte de los editores de El Universal Gráfico, quienes le han facilitado un equipo fotográfico propiedad de la empresa para que continúe su labor y que lo apoyarían económicamente para comprar una nueva cámara y un flash si es que los agresores no lo pagan.

Martínez García consideró la agresión como un atentado a la libertad de expresión, pues los manifestantes lo golpearon y rompieron su equipo sólo porque los estaba fotografiando para documentar periodísticamente la movilización popular.

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Someten a fotógrafo durante enfrentamiento entre policías y narcotraficantes

México, 13 de marzo de 2008.- Jesús Sotelo Loya, fotógrafo del periódico El Heraldo de Chihuahua fue sometido y tirado al piso por policías, el pasado domingo 9 de marzo, mientras agentes federales y soldados se enfrentaron con presuntos narcotraficantes en la ciudad de Chihuahua, en la frontera norte del país.

Los policías federales y soldados del Ejército Mexicano se enfrentaron con presuntos narcotraficantes, lo que dejó un saldo de un militar y seis presuntos delincuentes muertos.

Sotelo Loya vive a unas cuadras del lugar donde se dio el enfrentamiento, por lo que llegó antes que las fuerzas policíacas, pero momentos después fue sometido por los policías municipales.

Sotelo Loya fue tirado al piso por policías municipales, mientras uno le puso una rodilla en la espalda para evitar que se moviera, otro le colocó un arma cerca de la cabeza. Esposado y en el suelo permaneció durante dos horas hasta que fue identificado plenamente por colegas y otros policías.

Por los hechos Sotelo Loya presentó una denuncia ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de Chihuahua.

David Piñón Valderrama, jefe de Información de El Heraldo de Chihuahua, dijo al CEPET que en la agresión los agentes policiales le quitaron al foto reportero su cartera y un radiocomunicador, objetos que le fueron devueltos posteriormente.

El pasado lunes 10 de marzo los policías que no dieron su nombre, se presentaron en las oficinas del periódico para ofrecer una disculpa y argumentaron que sometieron Sotelo Loya porque en ese momento se encontraban bajo el estrés del operativo.

El reportero gráfico aceptó la disculpa y no acudió a ratificar la denuncia que había presentado. Según Piñón Valderrama, fuentes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Chihuahua, le dijeron que el área de Asuntos Internos continuaría las investigaciones y en su caso sancionaría a los policías agresores.

En entrevista, el jefe de Información de El Heraldo de Chihuahua, comentó que el propio fotógrafo agredido le señaló que: “por un lado que bueno que me tuvieron en el piso, porque escuchaba los balazos bien cerca”.

Este es el tercer conflicto que se da entre periodistas y policías en el Estado de Chihuahua durante operativos en un lapso de dos semanas. Los otros casos se dieron contra reporteros y fotógrafos del periódico El Diario en las ciudades de Delicias y Chihuahua.

Elementos del Ejército Mexicano que coordinaron el operativo pidieron incluso a los uniformados municipales que se retiraran del lugar de los hechos, con el argumento de que no requerían de su apoyo.

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